Cerca de la mayoría de los desiertos, el efecto puede explicarse por la explotación minera, el desajuste entre la extracción y el proceso natural de recolección de agua, ya sea por ríos circulantes, canales bajo tierra, lluvias, no alcanza a nivelarse con las necesidades para el proceso de minería, lo que empujados por los cambios climáticos aceleran el proceso de desertificación.

En Chile, un grupo de profesionales, intenta revertir el proceso en el desierto de Atacama, el llamado Granja de nubes, propone la explotación del agua que se pueda extraer de la atmósfera en forma de nubes.

El objetivo es equilibrar las condiciones que provocan la desertificación y proveeduría de agua.

El desarrollo en la región norte de Chile está intervenido por la instalación de multinacionales que explotan la minería, lo que empeora la situación de la zona de influencia.

La situación afecta al contexto, que a su vez tiene su injerencia en indicadores macroeconómicos.

La explotación de la minería en Chile, aporta un 14% de su PBI, a datos del 2014, pero a costa de descompensar el equilibrio ecológico, el aprovechamiento de suelos, la calidad de vida de los habitantes.

El impacto en las costumbres y redes sociales es más que significativo en tanto instalación de proyectos del primer mundo en una actividad que agota los recursos naturales.

El proyecto que se propone es la captación de agua atmosférica, técnica probada en otros países, como en Canarias, con un resultado interesante en la optimización del uso de recursos del suelo.

Los dispositivos de captación de agua atmosférica ha demostrado ser eficaces, para el suministro poblacional y necesidades de orden salubre, en Chile la idea es utilizar esta práctica para revertir un proceso que ya muestra señales críticas.

Los procesos de reversión de agotamiento natural suelen ser costosos y de largo plazo, son embargo las granjas de nubes es uno de los métodos que viene dando mejores resultados, ralentizan el proceso de desertificación, son de fácil construcción, y el cuidado no es difícil.

Hay una interesante propuesta para trabajar con este proceso en los países donde la explotación minera está provocando el mismo efecto que en Chile, es cuestión de políticas de cuidado medioambiental.